S.I. CATEDRAL LA PURÍSIMA CONCEPCIÓN
En un inicio, La Purísima fue Patrona de la Villa Fernandina de Jagua y del cuerpo de bomberos voluntarios de la localidad.
Estos hombres, que realizaban la importante labor de salvar
vidas, escoltaban a la Patrona en las procesiones, vestidos con sus uniformes de gala. El motivo por el
cual eligieron a la Purísima Concepción, como su patrona, fue la certeza de su protección ante difíciles
maniobras, incendios o catástrofes.
Sin duda alguna, la presencia de españoles en la región es uno de los orígenes de esta advocación.
Posteriormente el 20 de febrero de 1903, por bula papal de León XIII, la Parroquia local se erigió como Iglesia Catedral
bajo la advocación de la Purísima Concepción. Alrededor de la Purísima, durante todos los
años, desde la fundación del templo hasta nuestros días, se han realizado numerosos encuentros que
resaltan el legado de fe del pueblo cienfueguero.
Dentro del templo, la celebración de novenas vísperas a la festividad patronal, que se conmemora cada
8 de diciembre, es expresión de la devoción mariana de esta comunidad y su entorno.
De significativa importancia resulta aclarar el papel de los cultos marianos en la Inmaculada Concepción.
Constituye un punto de sumo interés en la comprensión de un culto inicial el hecho de que hacia la época fundacional de
la Villa no estaba reconocido el dogma, de ahí el valor histórico, religioso y cultural de esta singularidad del culto.
Imagen de la Purísima en el altar.
La hermosa imagen ubicada en la nave central de la iglesia es una obra artística religiosa, tallada en la
ciudad de Barcelona. Evidentemente posee características propias de la época y evoca a la Madre de
Cristo aplastando a la serpiente referida en el pasaje apocalíptico de San Juan, quien hace alusión a una
mujer envuelta en sol con la luna bajo sus pies, luciendo una corona de doce estrellas.
La Inmaculada suele representarse con el mundo bajo sus pies,
envuelto en nubes, aplastando al mal.
La serpiente es símbolo de Satanás, pero María Inmaculada, reina, llena
de pureza, junto al día que
comienza. El sol es la gracia de santidad y símbolo de limpieza. La luna
se encuentra bajo sus pies, porque simboliza la mutabilidad por los
estados que adopta en las
noches, sin embargo, María está llena de firmeza y confianza en su
Creador. Las estrellas que adornan su cabeza, simbolizan las virtudes de
María, que no solo está libre de
manchas, sino que permanece llena de gracia. Es la Madre del Amor
Hermoso.
Fiesta Patronal de La Purísima Concepción
Tomado del trabajo de diploma: "La fiesta patronal de la Purísima
Concepción en Cienfuegos. Aproximaciones para un estudio de caso"
de Daniria Teresita Almaguer Naranjo.
Es una fiesta perteneciente a la ciudad de Cienfuegos, que vincula lo social con la actividad religiosa
católica vinculada con al culto de María Purísima, la Inmaculada, surgida desde el siglo XIX
se mantiene en el tiempo y el espacio, constituye una expresión de la singularidad de la
cultura cienfueguera, dirigida a celebrar la fiesta de la Purísima Concepción. Es una festividad de procedencia española.
Posee una estructura litúrgica, ritual, festiva, con una procesión que imbrica desde le siglo
XIX a elites religiosas, sociales, culturales y políticas celebrada el día 8 de Diciembre.
La Festividad de La Purísima Concepción constituye una de las fiestas tradicionales
más importantes de la región de Cienfuegos por ser la fiesta de la Patrona de la diócesis central de Cuba.
Es la fiesta más importante de las iglesias católicas en la Provincia de Cienfuegos,
por la participación de las altas élites religiosas y desarrollarse en un escenario
de significación patrimonial, de gran importancia urbana.
Esta forma parte de las conmoraciones marianas en Cuba.
En la actualidad la festividad de la Purísima Concepción se continúa
desarrollando según la tradición y cuenta con la siguiente estructura:
La Novena es una actividad litúrgica que dura nueve días antes del día
de la celebración, donde se desarrollan un grupo de actividades
que están vinculadas fundamentalmente a la actividad social, cultural y
religiosa que responden a un programa que se sustenta en un valor
educativo,
en el reforzamiento de la concepción sobrenatural de la vida,
reflexiones sobre la existencia humana, la fe y existencia de Dios,
los derechos humanos fundamentales y las normas morales.
Esta acción no está predeterminada institucionalmente sino que se
transforma de acuerdo a los
intereses de la Iglesia con respeto a la sociedad y lo que necesita
significarse de acuerdo a las necesidades sociales y culturales,
las estrategias mundiales de la Iglesia, las problemáticas educativas
cristianas y el Programa de Desarrollo de la Catedral de Cienfuegos.
En la entrevista realizada al P. Jairo plantea: “Cada año con motivo de la celebración de la Purísima, la comunidad trata de hacer un programa
durante nueve días, en el que buscamos darle un contenido, darle una ambientación, darle un sentido de acuerdo a lo
que tanto la comunidad está viviendo, como también lo que necesita el pueblo sentir y vivir entorno a una fiesta religiosa,
de tal manera de que se piensa en preparar lo que son las celebraciones de la eucaristía”
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