ASPECTOS ESPECÍFICOS DE LA RESTAURACIÓN Y RENOVACIÓN

El templo mide aproximadamente 30.00m de ancho por 50.00m de profundidad. La nave central tiene un ancho de libre de 9.75 m, los laterales de 4.76 m y las capillas de 3.95 m. La profundidad libre para la nave central y las naves laterales es de 32.27 m, para el presbiterio es de 5.45 m, para el ábside 5.00 m y para cada capilla 4.80 m. Las alturas interiores son las siguientes: nave central: 12.35 m, naves laterales y capillas: 6.80 m, vestíbulos: 6.35 m, coro 5.77 m. El ancho de los muros de ladrillo perimetrales, longitudinales es de 0.50 m, en los frontales: 0.95 m, en los posteriores 1.13 m y en los transversales entre capillas: 0.570 m.

La edificación consta de muros de carga perimetrales y transversales de ladrillos al igual que los pilares y las pilastras interiores. La nave central está cubierta con bóvedas de crucería con arcos estructurales, fajones de medio punto (colocados transversalmente entre pilares) y diagonales rebajados. Solo son visibles parcialmente desde el templo, los arcos fajones. Las naves laterales están cubiertas con bóvedas de arista y las capillas con bóvedas de cañón. Los arbotantes triangulares sobre las naves laterales y los contrafuertes usados como muros entre las apillas transmiten al suelo los esfuerzos que trasmiten los arcos fajones y diagonales.

La cubierta de la nave central ya reconstruida, está conformada por cerchas y viguetas metálicas con cubiertas de tejas francesas. El espacio entre ellas y las bóvedas es transitable mediante una pasarela central construida al efecto. La cubierta de las naves laterales y las capillas es plana (con losas de racillas). La primera no descansa sobre las bóvedas sino en un entramado (separado de las bóvedas, ya restaurado o reconstruido). La segunda descansa directamente sobre la bóveda de cañón con un relleno intermedio.

El proyecto titulado Restauración Interior de la Santa Iglesia Catedral “La Purísima Concepción” se ha elaborado a partir de un proceso previo de investigación histórica, arqueológica y constructiva, haciendo énfasis en los estudios realizados para determinar tanto el daño patrimonial realizado en la Iglesia por intervenciones arquitectónicas ejecutadas con anterioridad (a partir fundamentalmente de la década de los 60 del pasado siglo XX), y en los resultados de la defectación técnica para valorar los daños físicos del edificio producto de la acción de huracanes, capilaridad del terreno, filtraciones y otras causas. La magnitud de estos trabajos y su rigor han constituido una obligatoriedad que nos hemos propuesto, dado la categoría que tiene el edificio, considerado Monumento Nacional de Cuba.

Estos trabajos tienen tres objetivos fundamentales:

• Restablecer la autenticidad histórica de la arquitectura de la Iglesia, en aquellos elementos modificados por posteriores intervenciones efectuadas en la segunda mitad del siglo XX y que afectaron tanto la tipología de su arquitectura como la percepción de su espacio interior.
• Renovar todo lo concerniente a los focos litúrgicos, de acuerdo a las instrucciones del Concilio Vaticano II (1962-1965) y con la dignidad que corresponde a la Iglesia Catedral. Es fundamental para la Iglesia la experiencia sacramental de la asamblea cristiana en la liturgia y la tensión escatológica de su espacio. “ La liturgia consta de una parte que es inmutable, por ser de institución divina y de otras partes sujetas a cambio” (Constituto de Sacra Liturgia. Cáp. VII).
• Tratar las patologías que presentan todas las superficies de la Iglesia (pisos, bases, pilares, arcos, muros y bóvedas) y recuperar las terminaciones lisas (con enlucido) y los pisos originales, en los lugares que especifica el proyecto.

Restauración

La restauración comprende los trabajos a realizar para preservar o restablecer las características originales con estrictos requisitos de autenticidad.

• Investigar la conservación de la pintura mural en el ábside.
• Recuperar el enlucido liso de masilla en muros, pilares, arcos y bóvedas, en toda la Iglesia (cerca de 5630 m2) y pintarlo.
• Eliminar 18 pilastras estriadas falsas en toda la nave central y el ábside.
• Eliminar 18 capiteles corintios, falsos y recuperar o reconstruir los 14 capiteles dóricos de la nave central.
• Recuperar 18 grupos de gotas bajo el friso.
• Eliminar 10 cornisas falsas de yeso.
• Eliminar 2 cornisas falsas de hormigón armado.
• Demoler 24 recrecimientos de pilastras de aproximadamente 0.30 x 0.58 x 4.47 metros.
• Eliminar 12 arcos falsos de yeso y recuperar los originales (más altos).
• Reconstruir 12 molduras de medio punto en las archivoltas de los arcos.
• Reconstruir 24 molduras en las impostas, en las bases de los arcos.
• Restaurar o reconstruir 16 molduras, en arcos rebajados diagonales de la nave central y coro y 3 molduras en medio arco del ábside.
• Restaurar o reconstruir 35 molduras de las ménsulas soportes de los arcos anteriores.
• Eliminar rodapiés de terraza colocados en el muro perimetral entre presbiterio y el centro de la nave. Colocar rodapié de mármol en todos los muros y pilares de la Iglesia, de 0.26 m y 0.16 m de altura (100 m2). Ver Pl. No. 4.5.
• Eliminar los pisos de mosaicos en el vestíbulo lateral izquierdo y en el locutorio. Sustituirlo por el original de mármol blanco y cenefas negras.
• Eliminar fracción de piso de cemento en las capillas lateral izquierda 4 y 5, en el Baptisterio y el ábside. Sustituirlo por el original.
• Colocar 219 m2 de losas de mármol blanco típicas y restaurar aproximadamente 209 losas. Colocar 101 m2 de losas negras típicas y restaurar 492 losas (ver Pl No. 4.2 y 4.3).
• Colocar 56 m2 de peldaños en mármol blanco en el presbiterio (ver Pl No. 4.5).
• Restaurar y pulir todo los pisos de mármol de la Iglesia.
• Recuperar los 14 zócalos de los pilares (luego de restaurado).
• Conservar en el piso el límite del presbiterio original y las losas originales en esa área.
• Restaurar o reconstruir la carpintería en madera.
• Restaurar o reconstruir los 13 vitrales y las vidrieras de las 2 lucernas del presbiterio.
• Reconstruir las rejas originales de las dos ventanas hacia el pasillo.

Renovación

La renovación comprende los trabajos a realizar introduciendo mejoras, en correspondencia con el Concilio Vaticano II.

En función de los Focos Litúrgicos de la Santa Misa para favorecer su visibilidad y su dignidad:

• Aumento de un peldaño en el presbiterio y otro en la Sede.
• Pequeño aumento del presbiterio hacia la Asamblea.
• Conformación de un nuevo piso, conservando el histórico con su límite.
• Construcción de la nueva Sede en mármol y en armonía con el Altar Mayor pero diferenciado.
• Construcción del nuevo Ambón en mármol.
• Construcción de una nueva Mesa-Altar más larga y más centrada en el presbiterio.

Además:

• Construcción del local auxiliar de la Sacristía debajo del Altar Mayor, ennobleciéndolo.
• Restauración del Altar Mayor y renovación de su base en mármol y en todo su perímetro.
• Renovar el Baptisterio.
• Renovar y/o restaurar el mobiliario.
• Restaurar y/o renovar los Altares.
• Renovar en funciones y diseño tres nuevas áreas: el locutorio, la cripta y el sagrario.
• Renovar la escalera de hormigón del locutorio.
• Eliminar la base de hormigón del Altar de la Virgen del Carmen.

La complejidad de los trabajos de ejecución y la decisión última sobre los materiales a utilizar están determinadas por la condición excepcional de que la Iglesia es Monumento Nacional y los trabajos están definidos como de restauración histórica. Por esta razón se han realizado desde el inicio del proyecto, coordinaciones con la Dirección de la Oficina de Monumentos y sitios históricos de Cienfuegos, con la Dirección de Arquitectura Patrimonial de la Oficina del historiador de la Ciudad de la Habana y con la empresa de Restauración de Monumentos de dicha Oficina.

Los trabajos se determinaron por las patologías presentadas en todas las superficies interiores y por las soluciones del proyecto para preservar los valores arquitectónicos auténticos del siglo XIX. Se considera además la ampliación del presbiterio por necesidades de esta antigua parroquia convertida en Catedral en el siglo XX. No se incluyen, por sus características, las molduras superiores (capiteles, aristas en bóvedas, impostas y archivoltas en arcos), los altares, mobiliario, cancelas, herrajes, carpintería y estudio de color, que en su conjunto pertenecen a la etapa de proyecto de interiorismo.

Vitrales

En la defectación a los vitrales, con excepción del Vitral de Jesucristo Salvador del Mundo colocado en el centro de la pared posterior del coro que se conserva en general bien, todos los demás vitrales están dañados o lesionados en mayor o menor medida a causa de los huracanes, la humedad, los insectos y los golpes de impactos ocasionados posiblemente en su mayoría por los esfuerzos al cerrar las ventanas pivoteadas cuando no cerraban bien por hinchamiento de la madera (por la humedad) como se aprecian en los nueve vitrales.

Pisos

Se han tomado en consideración los daños y lesiones producidos por causas accidentales en pisos (incluyendo asentamientos en la anterior ampliación del presbiterio) y por el efecto de la humedad, tanto por la capacidad (supuesta por evidencias y testimonios, afectada su visibilidad debido al color oscuro y textura actual de las superficies), como por la infiltración del agua de lluvia, eliminada por los trabajos ejecutados en el techo y las cubiertas planas, por su extrema magnitud, afectó a todas las superficies y es difícil diferenciar en la parte inferior, sus efectos con relación a la capilaridad.

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